Por Daniel Antilef Valdebenito*

El pasado 23 de diciembre de 2019, miembros del Concilio de Iglesias Históricas y Protestantes de Chile y de la Mesa Ampliada, firmaron una declaración en la que se reconocen acercamientos entre este grupo de representantes de Iglesias Evangélicas de Chile y la Gran Logia Masónica de Chile. Los motivos del acercamiento según palabras de Sebastián Jans Pérez, Gran Maestro de la Gran Logia de Chile se deben a “la crisis que vive nuestro país y a su vez considera el acuerdo como histórico, ya que el primer acercamiento entre la masonería y organizaciones de carácter cristiano”[i].

En el sitio web de la Comunidad Teológica Evangélica de Chile (CTE), puede encontrarse la declaración conjunta[ii]. Según aquel, dentro de los representantes de los grupos evangélicos que firman el documento encuentran:

Para entender cuan representativo es este acuerdo, debemos entender primero la complejidad de la estructura de iglesias evangélicas en nuestro país. Si nos remontamos al siglo XIX, tiempo en que comenzó la inmigración protestante, entenderíamos el origen de esta estructura compleja, marcada de divisiones. Los inmigrantes protestantes que arribaron en nuestro territorio con el propósito de evangelizar ya venían a su vez bajo el patrocinio de instituciones protestantes en Europa y Estados Unidos. Muchas de ellas fueron exitosas en su proceso expansivo y muchas otras fueron mutando como característica del proceso adaptativo y dieron origen a nuevas denominaciones.

Aunque la finalidad de este artículo no es revisar la historia de los acuerdos o desacuerdos de las iglesias evangélicas, es indispensable recalcar que en nuestra historia nacional han existido diversos esfuerzos de parte de las iglesias y del gobierno para crear instancias de acercamiento y unión. En este sentido, actualmente existe una organización la cual dice representar gran parte del movimiento evangélico protestante de Chile: La Mesa Ampliada de Organizaciones Evangélicas, también conocida como Unión Nacional Evangélica (UNE). Dentro de estos grupos existen representantes de un porcentaje considerable de denominaciones evangélicas en Chile, pero que no necesariamente representan el sentir de las iglesias (entendiendo a las iglesias como la comunidad eclesiástica compuesta por un cierto número de fieles).

Otro dato importante es que la cantidad de evangélicos en Chile, es alrededor del 16% según encuesta CEP Chile 2018. De este porcentaje, de acuerdo a palabras de Humberto Lagos, aproximadamente el 80% son pentecostales[iii]. En la actualidad existen más de 3200 iglesias evangélicas registradas bajo personerías jurídicas, cantidad que claramente está lejos de ser representada por organismos como la UNE o CUPREM.[iv]

De acuerdo los datos publicados en la página web de la mesa ampliada de la UNE, las siguientes congregaciones y organizaciones están actualmente representadas por esta organización[v]:

Al observar la nómina de representantes que firman el acuerdo de diálogo con la Gran Logia Masónica de Chile y luego de revisar los datos presentados, queda cuestionarse: ¿Qué tan representativo es este acuerdo?

Hasta la fecha solo la Iglesia Metodista de Chile y la Comunidad Teológica Evangélica de Chile se han manifestado públicamente. Los primeros a través de declaraciones de la Reverendo Raquel Riquelme, directora del Seminario Metodista, y el Obispo Jorge Merino en la página de la Iglesia Metodista de Chile, quienes señalan “Como resultado del primer encuentro hemos comprobado que dialogar, que encontrar puntos y áreas de colaboración, que superar mitos que separan, es posible, y que lo que se requiere es descubrirnos y conocernos, conocer nuestras historias, encuentros y desencuentros.  Que ello es posible si reconocemos nuestra común humanidad y responsabilidad para construir una sociedad fraterna, respetuosa, responsable y justa para todos y todas.”[vi]

A su vez, Daniel Godoy, rector de la Comunidad Teológica Evangélica de Chile en un video informativo de la Gran Logia de Chile declara “Es un compromiso importante, es una tarea necesaria y al firmar la declaración lo hacemos con la convicción de que efectivamente debemos impulsar acciones de este tipo, que efectivamente nos lleven a recuperar nuestro país.”[vii]

Sin embargo, las Iglesias pentecostales más numerosas de Chile representadas y no representadas en la UNE como CUPREM como también aquellas no pentecostales representadas por UBACH y todo el listado anterior, no han emitido declaración alguna. ¿Se puede entonces considerar este acuerdo representativo? Podríamos decir más bien que este acuerdo nace de intereses muy particulares de grupos minoritarios dentro de las comunidades evangélicas de Chile que, aprovechando su participación en organizaciones “representativas”, han promovido diplomáticamente sus intereses públicos.

Si la Mesa Ampliada, como reza en sus principios, “representará lo más objetivamente posible al Cuerpo de Cristo en Chile”[viii] y, además, cuenta en su comité ejecutivo con la presencia de representantes de diversas iglesias pentecostales como por ejemplo el pastor Carlos Salas Peña, quien según el sitio web es Secretario del Directorio Iglesia Metodista pentecostal de Chile de Derecho Público y Director Comité Ejecutivo Mesa Ampliada UNE – Chile; o  Mario Salfate Chacana, nada menos que el Obispo Presidente de la Corporación Iglesia Metodista Pentecostal de Chile de Derecho Privado, quien es Director Comité Ejecutivo Mesa Ampliada UNE – Chile, entre otros; entonces la pregunta lógica es: ¿Están realmente de acuerdo estos y otros líderes pentecostales con el diálogo evangélico que se ha iniciado con la masonería? Y de ser así, ¿Bajo qué razones? ¿Por qué no han expresado públicamente su posición referente a este tema, siendo que pertenecen a UNE-Chile y, por lo tanto, debiesen estar informados de esto? ¿Por qué no le han informado a sus iglesias pentecostales respecto de su posición sobre este asunto de tan grande envergadura, como el propio Gran Maestro masón de Chile lo ha hecho ver?

Entre las iglesias pentecostales que tienen representatividad en UNE-Chile, están la Iglesia Metodista Pentecostal de derecho público y de derecho privado; la Misión Pentecostal Apostólica, la Iglesia Apostólica Pentecostal, la Iglesia Evangélica Pentecostal Reformada y las Asambleas de Dios. Estas iglesias, hasta que aparezca un desmentido, estarían representadas en ese diálogo. ¿Qué opinan de ello los fieles pentecostales que componen estas denominaciones a lo largo de todo el país? ¿Se les ha informado de que sus iglesias estarían a favor de este diálogo?

Como laicos, es importante que seamos informados de estas cosas. Sería beneficioso que las iglesias aquí mencionadas puedan manifestar su postura, cualquiera sea, ya que solo así podremos aclarar si acuerdos de este tipo en realidad nos representan como comunidad evangélica y pentecostal de Chile, o si más bien corresponden a estrategias de grupos minoritarios que al alero de estas organizaciones y que tras discursos de unidad, buscan satisfacer intereses personales o políticos.

*Colaborador de PP.

[i] https://www.youtube.com/watch?v=UMR9_v0ZdHU

[ii] http://ctedechile.cl/wp-content/uploads/2019/12/Declaraci%C3%B3n-p%C3%BAblica-3.pdf

[iii] https://www.cooperativa.cl/noticias/sociedad/religion/chile-tiene-2-500-iglesias-reconocidas-como-se-explica-esta/2015-07-13/124013.html

[iv] http://www.economiaynegocios.cl/noticias/noticias.asp?id=400660

[v]  http://www.unemaschile.cl/organizacion/

[vi] https://www.metodistachile.cl/2019/12/30/informacion-sobre-declaracion-conjunta-iglesias-historicas-mesa-ampliada-une-chile-y-masoneria/

[vii] https://youtu.be/UMR9_v0ZdHU

[viii] http://www.unemaschile.cl/organizacion/